El Ayurveda es el sistema tradicional de sanación de la India. Su nombre significa “Ciencia de la Vida” y su visión abarca como vida la combinación de cuerpo, mente y espíritu como un todo.
Según este sistema, el cambio estacional es el momento en el cual somos más vulnerables a la enfermedad. Hemos entrado en la primavera, estación de la limpieza o purificación interior.

En el mercado aparecen todo tipo de producto o de rutinas a seguir para realizar esta “limpieza absolutamente necesaria”. Como siempre, te aconsejo primero de pensar si realmente la necesitas y qué es lo que realmente necesitas. Recuerda que cada uno de nosotros somos una entidad diferente, tenemos un historial absolutamente único, construido en los años por nuestras experiencias y nuestras reacciones a éstas. Por ello, como nos enseña el Ayurveda, no hay una sola y única rutina para cada uno de nosotros.
Primero observa tu situación. En general, pero no tiene por qué ser así, en primavera aparecen estos malestares: la digestión se vuele más lenta y pesada, nos sentimos letárgicos por falta de energía, y aparecen alergias, exceso de mocos y los resfriados. Todos estos síntomas son muy comunes y normales en esta estación.
El invierno es un período frío en el que la nieve se ha acumulado en las montañas y en el que nosotros hemos comido más grasas, hemos pasado más tiempo encerrados y quietos (manta, sofá, potajes, …). Sin embargo, con la llegada de la primavera y el calor, la nieve se empieza a licuar y, al mezclarse con la tierra, se hacen barrizales.
Algo parecido pasa en nosotros: todo lo acumulado en invierno, el exceso de presencia en nuestro cuerpo de los elementos agua y tierra, (Kapha), se manifiesta en forma de narices goteantes, mucosidades y congestión. Y con el aumento de las temperaturas, este exceso o acumulación se empieza a movilizar y debe ser eliminado.
Y para esto está la primavera. La estación de las flores, de los días luminosos, de las brisas que anuncian el buen tiempo y ganas de pasar más tiempo al aire libre y también la estación más incómoda para muchas personas: es el tiempo del moco y de la congestión.
Por lo tanto, si tienes un fuerte desequilibrio en este factor Kapha, que se agrava en primavera, que se manifiesta con los síntomas que hemos comentado, entonces sí te viene bien seguir los consejos para efectuar una buena limpieza sobre todo a nivel alimentar antes de recorrer a los antihistamínicos.
Consejos generales
Limpieza de la nariz: es recomendable que hagas una limpieza de nariz con la lota nasal por las mañanas antes de tu práctica. Si sufres de las típicas alergias primaverales puedes hacer la limpieza más seguido, incluso todos los días durante un tiempo breve.
Muévete: Kapha necesita el ejercicio físico, activo y dinámico para salir del letargo invernal. Otro punto muy importante es la práctica de pranayama o ejercicios de respiración, para eliminar la congestión pulmonar y te dará la sensación de ligereza. Intenta respirar el aire fresco de la mañana, date un paseo matutino.
Alimentación: desayuna ligero, busca lo liviano y fresco, reduce las grasas y los lácteos, evita las bebidas frías, cocina tus comidas y evita el crudo, usa especias picantes en tus comidas para despertar el metabolismo. Si quieres una dieta para este período, mejor contactes con un terapeuta ayurvédico para que te visite y te aconseje lo mejor para tu constitución.