Cuando se habla de posturas invertidas, la mente va de inmediato a la postura encima de la cabeza, Shirsasana (“Shirsa”: cabeza) cuando realmente el Yoga considera “inversión” cada vez que la cabeza se coloca por debajo del corazón. Hay muchas más posturas de Yoga que son “inversiones”, por ejemplo, las “Prasarita”.

Entonces, ¿qué tienen de tan especial las posturas más famosas, Shirsasana y Sarvangasana, respectivamente encima de la cabeza y de los hombros, para llegar a llamarlas Rey y Reina de los Asanas?
Porque además de tener unos efectos inmediatos y profundos en la fisiología del cuerpo por su efecto en el circulo y riego sanguíneo, en el sistema endocrino y en el sistema digestivo, tienen un efecto profundo en la fisiología energética del cuerpo sutil.
Según la filosofía tántrica, base importante del Hatha Yoga, el más practicado en occidente en sus distintas formas, el cuerpo físico del ser humano solo es el primer peldaño de un sistema de varias capas de cuerpos más sutiles, energéticos, inseparables entre sí.
Con la práctica constante y correcta de estas posturas llegamos a influenciar los cuerpos sutiles gracias a su acción de inversión que coloca el fuego digestivo (manipura chakra), la zona del ombligo, por encima de la luna, el espacio que va del centro esotérico de la garganta al centro esotérico de la cabeza (de vishuddi chakra a ajña chakra).
Así, con un proceso alquímico, se enfría el fuego para que deje de quemar la energía vital y al mismo tiempo, gracias a la fuerza de gravedad, se revierte su flujo descendente y la pérdida de la sustancia que da la vida (amrita).
En el Kriya Yoga, estas posturas se transforman en un mudra, un gesto energético y llega a llamarse Viparita Karani mudra, el gesto de la longevidad que vence la muerte física y lleva a la iluminación espiritual. Viparita Karani aparece como un mudra en un texto de la edad media, que describe su propósito como aquel de la energía kundalini hacia arriba en el interior del cuerpo, usando la gravedad en contraposición a los Asana que se utilizan para crear estabilidad.

Foto de Viparita Karani Mudra
(Fuente: “Kriya Yoga” de Sw. Satyananda Saraswati)